Ya vamos a por tí, pequeña

"Cada minuto que pasa nos acerca más a ti, con lo solita que te habrás tenido que sentir todos estos días. Ya vamos, ea, ea. Ya se terminó. Tú no llores más. Que dentro de muy poquitos días estarás, otra vez, a los pies de la Catedral, mientras el Cielo de tu Sevilla se inunda, para decirte “bienvenida a casa”... J.A.

Ya vamos ea ea. Porque prometimos que volveríamos a por tí, porque te juramos fidelidad y así cumpliremos. El Sevilla FC, tu Sevilla, el único equipo de entre esas brillantes banderas que llevas en la base de tu Gloria que te traerá de vuelta a su ciudad, a tu ciudad, para que puedas volver a bailar un año más, entre incienso y azahar, entre farolillos y albero, junto con tu hermana de Mónaco, quien te echa mucho de menos...

Ya vamos ea ea. Porque tú eres la Copa que nos dio la vida, la Copa que nos pertenece, la Copa que nos devolvió la ilusión tras muchos años de sequía.
Sé que estás triste, que en Escocia no te tratan como en Sevilla, que echas de menos la planta noble del Ramón Sánchez Pizjuán, tu Museo, tu gente, los corazones de los millones de personas que palpitaron por tí en una noche mágica en Holanda, corazones blanquirrojos que latían al unísono en todo el mundo de Nervión.

Ya vamos ea ea. Porque el órgano de la Catedral de la ciudad que más te mima no suena igual si tú no estás aquí, porque las campanas de la Giralda no tañen con la misma alegría a la que le tienes acostumbrada, porque el Giraldillo te señaló un día con su pluma mágica el lugar que debías ocupar entre nosotros y nuestros corazones.

Ya vamos ea ea. Porque tus Guardianes de Nervión te custodiaran como cáliz eterno, por la bendita locura que nos diste, porque tú y yo formamos un tándem perfecto, porque fue un flechazo de amor, porque te ví y te quise para mí, porque fue un deseo puro el que formaras parte de nuestra Historia, el pertenecer a nuestra Leyenda, porque el Tercer Anillo ha vuelto a esbozar una sonrisa al tener la certeza de poder acariciar tu metal plateado, porque en la Sevilla del cielo también existen los sueños, porque toda España no tendrá más remedio, otra vez, que rendirse ante tí y ante el maestro de los sueños apodado Sevilla FC.

Ya vamos ea ea. Porque Jesús Alvarado te cantará los goles que te librarán de las cadenas que te tienen maniatada a la tierra de William Wallace, goles que serán como nanas en sus labios para que puedas quedarte dormida entre los brazos de nuestros héroes, entre los brazos de nuestros campeones.

Ya vamos ea ea. Porque ya quedan horas para que Javi Navarro vuelva a levantarte al cielo eterno, y entre papelillos de Gloria vuelvas a saborear la Victoria de un equipo Centenario que te cuida como nadie más sabe hacerlo en el panorama futbolístico.

Ya vamos ea ea. Porque sin tí me falta la vida... Pero recuerda, querida copita, que siempre propagarás a los cuatros vientos de Europa que Sevilla NUNCA TE DEJÓ. Y cuando nosotros no estemos ya, pequeña, siempre tendrás que pregonar que Sevilla NO8DO.