martes, 26 de mayo de 2009

Asistentes de Carlos III

Carlos III con traje de cazador. Francisco de Goya (1786-1788). Colección: Duque del Arco (Madrid).

1756-1760.- Pedro Samaniego Montemayor, Marqués de Monte Real. Saneó la ciudad, realizando un plan de limpieza y construyó la alcantarilla del Tagarete.

1760 (julio a noviembre).- Julián Robión. Emplazó a los propietarios de casas ruinosas y solares a que edificaran en el plazo de un año bajo sanción de entregar a tributo sus inmuebles. Subastó parte de los terrenos de La Laguna, mandó trazar la calle y la Puerta de San Fernando y ensanchó la de Triana.

1776-1779.- Juan Antonio de Santa María. Realizó pocas actuaciones significativas en la ciudad. Su mandato coincide con los años centrales del periodo más fructífero de la tauromaquia hispalense (1771-1785), con gran afición del pueblo por el toreo a pie, en el que destaca la terna Pepe-Hillo, Costillares y Pedro Romero.

1779-1782.- Francisco Antonio Domezain. Entre sus iniciativas destacan el allanamiento del tramo de la Ronda comprendido desde la Puerta de Carmona a la de San Fernando y el haber encargado el proyecto de defensa del río a Antonio de Ulloa, proyecto que contemplaba la prolongación de los husillos y la construcción de malecones.

1782-1785.- Pedro López de Lerena. Afrontó con éxito la riada de 1783, pues tras ella no faltó pan en la ciudad al mantener abastecidos atahonas y hornos. Además, construyó malecones con tres gradas desde el Almacén de Maderas hasta la Torre del Oro y realizó obras en el Altozano. Durante su mandato y hasta 1784 en que fue restituido el Consulado Marítimo, el puente de Barcas estuvo gestionado por el Ayuntamiento. En 1783 fue reparado el edificio de la Audiencia y en 1785 se suspenden los espectáculos taurinos.

Fuente: ABC.

2 comentarios:

María_azahar dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Duende del Sur dijo...

La verdad es que yo también estoy en contra de todo maltrato animal y, cuando digo todo, también me estoy refiriendo a estas absurdas e injustas matanzas de los toros de lidia (menos sentido aún le veo a correr delante de los toros).

Eso sí, la tauromaquia es una fuente de ingresos bastante aceptable en nuestro, y aún mayor en Andalucía. Y difícilmente podrá ser erradicada a corto plazo esta ¿fiesta? nacional...

¡Besos, mi niña! Te quiero.