Calles que empiezan por G

Galera: En El Arenal, se denomina así porque en ella se instaló la galera o cárcel de mujeres en el siglo XVI, cuyas reclusas realizaban complicadas labores de aguja, como cuellos de uniformes o puñetas, de donde nació la frase despectiva de “vete a hacer puñetas”.

Galicia: En el Cerro del Águila, es una popular calle arbolada que enlaza la calle Afán de Ribera con Lisboa.

Gamazo: Recibe este nombre desde el siglo XIX. Anteriormente, fue parte de la mancebía de la ciudad hasta la erradicación de la misma de este barrio en el siglo XVIII. Se llamó entonces el barrio de Molviedro y esta calle se dividió en dos tramos, Atocha y Compás de la Laguna.

García de Vinuesa: Desde el siglo XIII se llamó de La Mar, por estar en el barrio del mismo nombre, en el que Fernando III agrupó a las gentes relacionadas con el río y la mar, acogidos al Fuero especial del Almirantazgo y a cargo de las galeras que protegían las costas de Cádiz. En 1866 se le dio el nombre que aún perdura en honor de Juan García de Vinuesa, alcalde de Sevilla que murió en esta calle contagiado al visitar a los afectados del cólera.

García Morato, Avenida de: En el barrio de Los Remedios se la conoció inicialmente como Avenida de Tablada hasta que en 1939 se la rotuló así en memoria de Joaquín García Morato. En ella se encuentran la célebre Venta Pilín, inaugurada en 1918.

Garcilaso de la Vega: En la barriada de El Tardón, se rotuló de este modo en 1955 en honor de este buen militar y extraordinario poeta que vivió a comienzos del siglo XVI.

Gavidia, Plaza de la: Se conoce desde 1704 con el nombre de Plaza de la Gaviria, y así lo recoge Olavide en 1771, pero poco a poco el nombre se confundió con los distintos cambios que tuvo desde 1862 hasta 1931 en que se repuso su nombre original, pero como Gavidia y no Gaviria. En esta plaza, en el cruce con la calle Horno nació el 10 de febrero de 1767 el Capitán Daoiz, héroe del dos de mayo de 1808. Su estatua ocupa el centro de este hermoso y alegre espacio público sevillano.

General Merry, Avenida: Enlaza Felipe II con las avenidas de La Paz y Alcalde Juan Fernández, y recibió este nombre en 1971 en memoria del fallecido general. Desempeña una importante función de arteria urbana.

General Ollero: En el barrio de Santa Aurelia, esta calle ya estaba trazada en 1961 aunque no recibió este nombre hasta 1967, en honor del General Ollero, por las numerosas labores humanitarias que desarrolló en el Patronato de Protección a la Mujer, cuyo edificio se encontraba muy próximo.

Gerona: En Santa Catalina, recibe este nombre desde 1845 por haber soportado heroicamente esta ciudad el asedio de las tropas napoleónicas. Con anterioridad –desde la Reconquista- estaba dividida en dos tramos: Calderería de San Juan de La Palma y Santa Rufina, éste último llamado Sardinas al menos desde 1452. En ella vivieron los literatos Baltasar de Alcázar, Fernando Villalón y Juan Ramón Jiménez, y en otra de sus casas falleció el torero Varelito, en 1922.

Gloria: Estrecha y corta calle en el barrio de Santa Cruz, fue parte del corral de Doña Elvira desde 1369 y a finales del XIV se incluía en la zona conocida como Barrio Nuevo tras la persecución de los judíos en 1391; se segregó al construirse el Hospital de los Venerables en 1676, y Olavide la recoge como Venerables en 1771 pero es posible que ya en aquellos tiempos fuera conocida como Gloria. En 1894 se descubrieron unas galerías subterráneas con tres direcciones: Alcázar, Huerta del Retiro y Plaza de Doña Elvira. En 1933 murió en el número tres de esta calle el poeta Alejandro Collantes de Terán.

Gitanillo de Triana: En el barrio del Polígono de San Pablo, fue rotulada con este nombre en 1966 en memoria del torero gitano Francisco Vega de los Reyes (1903-1931), muerto a consecuencia de una cornada en la plaza de toros de Madrid.

Goles: Ocupa el espacio del llamado barrio de Goles en el siglo XIII, y ya en el siglo XI al ampliar la muralla los almorávides llamaron Bab-er Goles a la puerta situada en este lugar. Aunque no recupera este nombre hasta 1869 (antes se llamó calle del Adarve y Muro de la Puerta Real) es posible que este nunca desapareciera por completo en la mente de las gentes.

Golfo: Barreduela que al menos desde 1465 era conocida como calle de la Ollería, denominación que conservó hasta mitad del siglo XVIII, en que comenzó a llamarse Ganso; en 1845 Pelladero, y, a finales del XIX, Golfo. Durante los siglos XV y XVI formaba un ángulo recto con la actual calle Empecinado.

Góngora, Plaza de: En la barriada de El Tardón, lleva este nombre desde 1955 por el poeta culterano cordobés Luis de Góngora (1561-1627). Es de planta rectangular y tiene macetones, plátanos, bancos de hierro y farolas.

Gomari, El: En el barrio de Ciudad Jardín, se rotuló en 1949 en honor de este arquitecto de época almohade, autor de la mayor parte de la Giralda. Frente a las viviendas, un espacio abierto y arbolado de forma trapezoidal popularmente llamado “tenis” permite el esparcimiento a los más jóvenes.

González Cuadrado: En 1879 recibió este nombre en memoria de José González Cuadrado, fusilado por los franceses por negarse a identificar a sus compañeros de conspiración. Antes se llamó Tapetes, Bancaleros, Acuña y Peña Horadada. En 1827 murió en esta calle el poeta sevillano Francisco López de Castro, nacido en 1771.

Gonzalo Bilbao: En honor de este ilustre pintor sevillano (1860-1938), se rotuló con este nombre en 1940. Se llamó Afueras de la Puerta Osori en la Edad Media, en 1700 Alamedilla y a mitad del siglo XIX Ensanche.

Gorrión: En el barrio de Los Pajaritos, fue rotulada en 1962 y es la última que se construyó en el barrio, en su límite con la Avenida de Andalucía.

Goyeneta: Recibió este nombre en 1864, año del fallecimiento del alcalde Manuel de Goyeneta, que vivía en esta calle. Desde el siglo XIV se llamaba del Tajador Mal Lavado y en el XVI, al fundarse la Casa Profesa de los Jesuitas, calle de la Sopa, pues por su puerta trasera se daban los alimentos a los indigentes. Estuvo en ella la entrada de la Universidad Hispalense durante dos siglos y en el siglo XIX existieron casas de prostitución.

Gran Plaza: Desde que se realizó el proyecto de urbanización del barrio de Nervión figuraba como Gran Plaza de Nervión, que se recortaría más adelante. En 1937 se rotuló como Plaza del Capitán Cortés, recuperando su primitiva y nunca olvidada denominación en 1980.

Gravina: Llamada desde 1248 calle del Muro de la Puerta de Triana, fue Cantarranas al menos desde 1408 –así lo recoge Tirso de Molina en El Burlador de Sevilla- y hasta la segunda mitad del siglo XIX en que recibe el nombre actual por el almirante español Federico Carlos Gravina (1756-1806), muerto en la batalla de Trafalgar. Especialmente interesante es su número 31, tanto por la belleza del edificio, como porque en él vivió y murió el erudito José Gestoso, lustre arqueólogo e historiador. Tras las casas dela acera de los pares se encuentra adosada e intacta, la muralla histórica de Sevilla.

Greco El, Avenida: En el Polígono de San Pablo, esta importante arteria del barrio fue rotulada en 1967 con este nombre, aunque desde 1960 fue calle El Greco y aparece como Callejón de los Estudiantes en el plano del Infante Don Carlos en 1827.

Guadalquivir: Llamada así desde 1845, al final de ella se encontraba la puerta de la Muralla llamada Puerta de los Barcos por los árabes y, tras la Reconquista, Puerta de San Juan. En el siglo XV se la denominó con el curioso nombre de Puerta del Ingenio por la máquina-grúa que se emplazaba frente a ella encargada de cargar los barcos. Más tarde, en el XVI fue Río, San Roque, Hospital de Santa Ana, y también Lenceros, y a finales de aquel siglo Santiago de la Espada y Santiago de los Caballeros; por último, en el XVII se llamó Estrella.

Guadiana: Recibe este nombre desde 1845, cuando sustituyó al de Carne, nominación que tenía desde mitad del XVIII. Para Justino Matute, también se llamó Guisanderos desde el XVI según José María de Mena, por los productos ya cocinados que aquí se vendían.

Güines: En recuerdo de este municipio cubano fue bautizada así con motivo de su edificación a finales del siglo XIX por la familia Marañón, que había hecho fortuna en la isla caribeña. En ella se encuentra la célebre bodega Blanco Cerrillo.

Guzmán el Bueno: Con este nombre se la conoce desde 1845. Tras la Reconquista fue calle de los Infantes o del Infante de Molina y la plazuela intermedia fue llamada de Marmolejo desde el XV. A comienzos del XVI tanto una como otra eran conocidas como Botica o Botica de las Aguas, presumiblemente por alguna farmacia o laboratorio de agua de colonia. Hace unos años aparecieron hermosos mosaicos romanos en uno de sus solares, y hay que destacar las bellas casas palacio que en ella se encuentran, especialmente las números 4, 8 y 9.

Fuente: ABC.